29.9.08

Como un tango

¡Qué pena y qué complicidad me dan los tangos! Esos que tanto quisiste, esos que yo no amaba. Los mismos que nos entregaste como herencia una tarde de mayo, antes de partir.
Y ahora son tan míos, tan nuestros como tuyos, porque son el tono de nuestras vivencias, el tango de nuestras vidas.
Esa cadencia y esa melodía hieren sin dolor, o son acaso un dolor sin cura y sin espinas: el lenguaje de las almas que -desde mundos separados- se aman, se sostienen y se ayudan.
Acaso allá arriba suenan todavía. Acaso los escuchas como te escucho y te veo en ellos. Acaso ellos somos nosotros, somos todos por la vida -o por lo que llamamos tal- teniendo la misma verdad y melodía.
Concepción, 26 de septiembre de 2008.

1 comment:

Anonymous said...

MARRRRSEEELOOOSSSSSSSSS.....COMO TE VA LA VIDA ??? A QUE TE DEDICAAS ??? TE HA DEJADO YA EN PAZ CATTANI ??? JEJE YO ESTOY YA OTRO AÑO MAS EN JAEN...AHORA MISMO ESTOY SENTADO AL LADO DE MIGUEL ESPAÑA QUE TE MANDA SALUDOS...UN ABRAZOO MARRCELOOO QUE TE ECHAMOOS DE MEEENOOOOSSSS....